Un vídeo publicado por la cuenta Social Drive en el que se ve a un ciudadano con un radar oculto en su vehículo particular está generando un gran revuelo en las redes sociales. El documento está grabado en la provincia de Toledo, en la carretera N-Va ubicada en el polígono industrial de Cazalegas, y desde la DGT informan que se trata de una vía municipal donde carecen de competencias y que este tipo de prácticas es ilegal.
Es la primera vez que en España se observan radares camuflados en coches particulares. El conductor, que se percató de lo que estaba ocurriendo, se acercó al coche en cuestión para comprobar si eran agentes los que aguardaban en el interior del mismo, y comprobó que era un ciudadano más el que estaba manejando el cinemómetro. Entonces, le preguntó qué estaba haciendo y este respondió que «un control de velocidad».
Es la primera vez que en España se observan radares camuflados en coches particulares. El conductor, que se percató de lo que estaba ocurriendo, se acercó al coche en cuestión para comprobar si eran agentes los que aguardaban en el interior del mismo, y comprobó que era un ciudadano más el que estaba manejando el cinemómetro. Entonces, le preguntó qué estaba haciendo y este respondió que «un control de velocidad».
"Es algo más común de lo que parece y, aunque es ilegal, dentro de nada estoy seguro de que lo cambiarán para que deje de serlo. Es un gran negocio. Sobre todo pasa con los ayuntamientos medianos o pequeños, que no tienen medios ni manos para controlar el tráfico de sus localidades a este nivel, pero ven una oportunidad de recaudar, así que subcontratan la gestión y listo. Lo hacen empresas privadas que han sido muy listas y han montado un negocio que les viene de perlas a todos", comenta en conversación con El Confidencial Pedro Javaloyes, portavoz de DVuelta, un despacho de abogados experto en reclamación de multas y otras denuncias de tráfico. De ahí, asegura el experto, que lo visto en el pueblo toledano no sea más que un ejemplo más. (+)