En un contrato menor no se puede fraccionar el objeto del contrato con la finalidad de evitar fraudes de contratación. (por ejemplo: no debería hacerse un contrato menor para el suministro de lapiceros y otro distinto, a la misma empresa, para gomas de borrar, más bien tendría que ser solo uno de "material de oficina").
Los contratos negociados sin publicidad entre 2014-2016 se muestran abajo:
Este tipo de contrato debe ser algo excepcional y debe justificarse el porqué no se ha podido ejercer la contratación de forma ordinaria, además (como puede verse en la tabla de arriba), está limitada por el importe: hasta 200.000 en obras y 60.000 el resto.
Los contratos menores son justificables en cuanto que se producen imprevistos continuamente, y el ayuntamiento debe ser capaz dar soluciones de forma lo mas ágil posible, pero los negociados sin publicidad deberían evitarse a toda costa.
Según nos indican fuentes del gobierno municipal; "los contratos llevan una memoria justificativa del área que solicita la contratación cuando se inicia el expediente, explicando la necesidad, o motivo, de la contratación". (Ver más >)
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Existen carencias estructurales y organizativas de la gestión de la contratación que provocan la inexistencia de una seguridad razonable de que la contratación se desarrollará por cauces que garanticen una ejecución ordenada, eficiente y sujeta a la legalidad. (Ver más >)
El Gobierno acabará con los contratos públicos sin publicidad
El Gobierno central ultima la legislación para acabar con el procedimiento negociado sin publicidad, precisamente la fórmula que usaban tramas como la Gürtel para trocear contratos y burlar el control. Y lo hace bajo la presión de Bruselas.