Doctor en Medicina. Médico General jubilado. Equipo CESCA (Madrid, España)
En la Comunidad de Madrid las cosas suceden como si el Gobierno de la misma estuviera a sueldo de la industria sanitaria privada. Es decir, el Gobierno de la Comunidad de Madrid está destruyendo el sistema sanitario público y, por consecuencia, se incrementa el negocio de la industria sanitaria privada a través del aumento de las pólizas de seguro médico privadas y de los “convenios” para prestar servicios.
En la destrucción de lo público, es clave desmantelar la atención primaria, el servicio cercano que, si funciona bien, permite resolver más del 90% de los casos y situaciones. La atención primaria es la pieza clave del sistema sanitario público y su caída arrastra a todo el conjunto. Esta atención primaria que se destruye en Madrid es pro-pobre, en el sentido de ofrecer más servicios a quienes más los precisan y, por ello, ofrece equidad (la sanidad privada es inequitativa, ofrece más servicios a quienes menos precisan y más dinero tienen).
El bebé muerto en Paracuellos del Jarama la víspera de Nochebuena es el símbolo de la brutalidad que, por austeridad o por simple negocio, destruye la solidaridad y la equidad de una atención primaria pública de calidad. Es el símbolo de que en la Comunidad de Madrid (y en otras Comunidades y en el Estado) las cosas suceden como si el Gobierno. (+)
En la destrucción de lo público, es clave desmantelar la atención primaria, el servicio cercano que, si funciona bien, permite resolver más del 90% de los casos y situaciones. La atención primaria es la pieza clave del sistema sanitario público y su caída arrastra a todo el conjunto. Esta atención primaria que se destruye en Madrid es pro-pobre, en el sentido de ofrecer más servicios a quienes más los precisan y, por ello, ofrece equidad (la sanidad privada es inequitativa, ofrece más servicios a quienes menos precisan y más dinero tienen).
El bebé muerto en Paracuellos del Jarama la víspera de Nochebuena es el símbolo de la brutalidad que, por austeridad o por simple negocio, destruye la solidaridad y la equidad de una atención primaria pública de calidad. Es el símbolo de que en la Comunidad de Madrid (y en otras Comunidades y en el Estado) las cosas suceden como si el Gobierno. (+)
