Las vías pecuarias
son caminos históricos de titularidad pública. Las leyes de vías
pecuaria las clasifica como suelo protegido, pero cada día soportan más
ocupaciones que desvirtúan su naturaleza y función.
Desde 2015 Ecologistas en Acción de la Comunidad de Madrid realiza un informe anual sobre
ocupaciones temporales (autorizaciones para construir o para instalar
servicios). Estas autorizaciones que deberían ser excepcionales, se han
convertido en algo cotidiano. Desde 2015 a 2020 se han solicitado 2.762
ocupaciones.
La zona montañosa de la región es la que más ocupaciones ha soportado en 2020, ascendiendo al 53,84 % de las solicitudes efectuadas.
La zona montañosa de la región es la que más ocupaciones ha soportado en 2020, ascendiendo al 53,84 % de las solicitudes efectuadas.
Ante esta situación, el informe de Ecologistas en Acción concluye
que las vías pecuarias de la Comunidad de Madrid no soportan más
ocupaciones. Por ello solicitan a la Consejería de Medio Ambiente,
Ordenación del Territorio y Sostenibilidad una moratoria en su
autorización.
Las
ocupaciones temporales, que deberían ser situaciones excepcionales en
las vías pecuarias se han convertido en algo habitual debido a la
permisividad de la Consejería de Medio Ambiente, Ordenación del
Territorio y Sostenibilidad de la Comunidad de Madrid. Sobre las vías
pecuarias de la Comunidad de Madrid se siguen construyendo de forma
legal y sin excepción alguna, ductos de productos energéticos (gas y
petróleo), aducciones de agua, canalizaciones de aguas residuales,
tendidos eléctricos de distinto voltaje, tendidos telefónicos, depósitos
de agua, calas de todo tipo, etc. También existen ocupaciones que se
autorizaron hace decenios, que ya no son funcionales y que deberían ser
desmanteladas, como restaurantes (Bustarviejo), tendidos telefónicos
(Aranjuez, Paracuellos de Jarama), etc. (+)